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Ruslán Artikmirádov

11 DE ENERO DE 2021
TURKMENISTÁN

Ruslán Artikmirádov podría ser enviado a la cárcel una segunda vez por su objeción de conciencia

Ruslán Artikmirádov podría ser enviado a la cárcel una segunda vez por su objeción de conciencia

Fecha prevista de la sentencia

Un tribunal militar de Turkmenistán pronto a anunciará su decisión en el caso contra Ruslán Artikmirádov. Nuestro hermano podría ser condenado a dos años de cárcel por su objeción de conciencia. Ha estado detenido desde el 15 de diciembre de 2020 y esta es la segunda vez que podría ser encarcelado por negarse a hacer el servicio militar.

Información personal

Ruslán Artikmirádov

  • Año de nacimiento: 2000 (gengeshlik Alpan).

  • Datos biográficos: Se crio en el campo. Era un buen estudiante y trabajó en un taller mecánico de vehículos. Le gusta jugar fútbol.

    Su madre le enseñó a vivir de acuerdo con los principios de la Biblia. A Ruslán le impresionó lo unidos que están y lo mucho que se quieren los testigos de Jehová. Así que él también se hizo Testigo en el 2015, a la edad de 15 años. El amor que siente por Jehová lo llevó a negarse a hacer el servicio militar.

Información sobre el caso

El 13 de agosto de 2018 sentenciaron a Ruslán a un año de cárcel por negarse a hacer el servicio militar. Tenía 18 años. Fue puesto en libertad el 12 de agosto de 2019 después de cumplir la condena completa.

En Turkmenistán, la ley permite que un joven sea condenado a ir a la cárcel dos veces si se niega a realizar el servicio militar por razones de conciencia. En el caso de Ruslán, volvieron a llamarlo a filas en noviembre de 2020.

Nuestro hermano Ruslán —que era totalmente consciente de que podían enviarlo de nuevo a prisión— se negó una vez más a hacer el servicio militar. Entonces, el 15 de diciembre de 2020, fue arrestado y puesto en prisión preventiva a la espera del juicio.

Ruslán está decidido a ser fiel a Jehová. Él cuenta lo que sintió la primera vez que lo juzgaron. Dice: “No tenía miedo, a pesar de que sabía que me tratarían injustamente y de que me esperaba una experiencia dura, una experiencia que me pondría a prueba. Pero no iba arriesgar por nada del mundo ni mi amistad con Jehová ni mi felicidad”.

Aquella experiencia en la cárcel no fue fácil para él. Tuvo que vivir en condiciones horribles y muchas veces sufrió maltrato. Pero Ruslán sentía la ayuda de Jehová constantemente. Él recuerda: “En prisión, siempre veía la mano de Jehová, por ejemplo, cuando me golpeaban. El primer golpe me dolía, pero los siguientes ya no”. Además, el cariño y apoyo de los hermanos locales lo fortaleció para seguir adelante. Y no solo eso, sino que esas muestras de bondad dejaron impresionados a los que lo rodeaban.

Aunque quizás tenga que volver a prisión, Ruslán se siente tranquilo. Él dice: “Estoy totalmente convencido de que Jehová me va a recompensar. [...] Cuando tienes una esperanza firme, eres inmensamente feliz; cuando eres feliz, eres fuerte y aguantas. Y una persona fuerte no se puede doblegar”.

¡Qué ejemplo el de Ruslán y otros jóvenes valientes! Ellos son una prueba viviente de que Jehová nos ayudará a enfrentarnos con valor y alegría a cualquier situación. Estamos seguros de que Jehová recompensará su lealtad inquebrantable al Reino de Dios (Hebreos 11:6).

a La fecha de la sentencia no siempre se informa de antemano.