La crisis económica y social continúa en Venezuela. Es muy difícil conseguir alimento, agua, combustible y medicinas por la escasez y los precios tan elevados. Debido a los frecuentes cortes de luz, cada vez faltan más alimentos, pues no se pueden mantener refrigerados. Además, la delincuencia sigue siendo un problema.

A pesar de esta situación, los más de 136.500 publicadores de Venezuela no dejan de predicar con entusiasmo. Por ejemplo, en comparación con el año anterior, en enero de 2019 había 7.000 publicadores menos en el país. Sin embargo, se dedicaron 90.000 horas más a la predicación. En abril de 2019, se dieron más de 195.600 cursos bíblicos. La cantidad de precursores regulares llegó a más de 30.000. A fin de apoyar la campaña mundial para invitar a las personas a la Conmemoración de la muerte de Cristo, 20.400 publicadores participaron en el precursorado auxiliar. Gracias a estos esfuerzos, casi 471.000 personas asistieron a la Conmemoración, es decir, más de tres veces la cantidad de publicadores del país. Por otra parte, muchas personas están asistiendo a nuestras reuniones. Una razón es que nuestros hermanos siguen llevando el mensaje de la Biblia a quienes buscan una solución confiable para sus problemas.

La sucursal de Venezuela sigue organizando la distribución de alimentos básicos que necesitan nuestros hermanos. Todos los meses, con la ayuda de algunas sucursales vecinas y gracias a las generosas donaciones a la obra mundial, la sucursal de Venezuela entrega cientos de toneladas de alimentos donados a 75.000 publicadores de 1.595 congregaciones.

Sin duda, nuestros hermanos de Venezuela enfrentan muchas dificultades. Pero nos anima ver que mantienen una actitud positiva, pues confían en que Dios los salvará (Habacuc 3:17, 18).