Un amigo es una persona que tiene una relación de afecto o cariño con otra. David y Jonatán se hicieron amigos después de que David mató a Goliat (1Sa 18:1). Cada uno se fijó en las cosas buenas del otro, y eso hizo que su amistad fuera muy sólida. Así que, para tener un buen amigo, hay que conocer bien a la otra persona, y eso requiere tiempo y esfuerzo. Sin embargo, en las redes sociales, se pueden conseguir “amigos” con un solo clic. En internet es fácil que las personas escondan quiénes son en realidad, ya que pueden controlar hasta cierto punto lo que otros ven y saben de ellas. Por eso, es bueno ponerse algunas reglas a la hora de aceptar amigos por internet. No tenga miedo de ignorar o rechazar una solicitud de amistad de una persona que no conoce bien por temor a que se ofenda. Como hay tantos peligros, algunos han decido no tener ninguna red social. Pero, si usted decide usar una, ¿qué debe tener en cuenta?