Jesús demostró lo que logrará el Reino de Dios. Él enseñó a sus seguidores a pedir en oración que viniera el Reino de Dios y que se hiciera la voluntad de Dios en la Tierra (Mateo 6:9, 10). También demostró cómo se hará realidad esa petición.
Cuando estuvo en la Tierra, Jesús alimentó a hambrientos, curó a enfermos y hasta devolvió la vida a personas muertas (Mateo 15:29-38; Juan 11:38-44). Como sería el Rey del Reino de Dios, pudo presentar un adelanto de las cosas maravillosas que ese Reino hará por sus súbditos (Revelación 11:15).
La situación mundial confirma que el Reino de Dios vendrá dentro de poco. Jesús predijo que antes de que el Reino de Dios estableciera la paz en la Tierra, el mundo estaría plagado de guerras, hambre y terremotos (Mateo 24:3, 7).
Estamos viendo todos esos problemas hoy en día. Por eso podemos estar seguros de que muy pronto el Reino de Dios los solucionará.
A lo largo de su ministerio, Jesús habló más del Reino de Dios que de cualquier otro tema. Durante siglos, sus seguidores han pedido en oración que venga ese Reino.
Millones de personas de todo el mundo han hallado en la Biblia las respuestas que tanto buscaban. Le invitamos a estudiar con nosotros este valioso libro.