1. Explique con un ejemplo por qué debemos seguir la guía de Jehová.

 IMAGINE que está perdido en medio de una selva. Está rodeado de peligros: animales salvajes, plantas venenosas e insectos de todo tipo. También corre el riesgo de tropezar con una roca y caerse. ¿Verdad que agradecería que alguien con experiencia lo guiara y lo ayudara a evitar todos esos peligros? Pues bien, el mundo es como esa selva. Está lleno de peligros, en especial para nuestra espiritualidad. Pero tenemos al mejor guía posible: Jehová. Él nos indica el camino que debemos seguir para evitar los peligros y llegar al nuevo mundo, donde viviremos para siempre.

2. ¿Cómo nos guía Jehová?

² ¿Cómo nos guía Jehová? Principalmente, por medio de su Palabra. Pero también utiliza a seres humanos como representantes suyos. Por ejemplo, mediante “el esclavo fiel y prudente” nos da alimento espiritual que nos ayuda a tomar buenas decisiones (Mat. 24:45). Estos no son los únicos hombres de los que se vale Jehová para guiarnos. Los superintendentes de circuito y los ancianos de congregación nos animan y nos aconsejan para hacer frente a las dificultades. Estamos muy agradecidos de que Jehová nos dé esa guía tan buena en estos últimos días tan complicados. Así podemos seguir siendo sus amigos y continuar recorriendo el camino que lleva a la vida.

3. ¿Qué analizaremos en este artículo?

³ Aun así, puede que a veces nos resulte difícil seguir la guía de Jehová, sobre todo cuando nos llega a través de hombres imperfectos. ¿Por qué? Quizás lo que nos digan no sea lo que queremos oír. O tal vez pensemos que sus consejos son poco prácticos o desacertados, y que por tanto no pueden venir de Jehová. En esos momentos es cuando más tenemos que confiar en que Jehová está guiando a su pueblo y en que lo mejor que podemos hacer es seguir su guía. Para fortalecer esa confianza, en este artículo vamos a analizar las siguientes tres ideas: 1) cómo Jehová guio a su pueblo en tiempos bíblicos, 2) cómo nos está guiando hoy en día y 3) cuáles son los beneficios de seguir siempre su guía.

CÓMO GUIO JEHOVÁ A LA NACIÓN DE ISRAEL

4, 5. ¿Cómo demostró Jehová que estaba usando a Moisés para guiar a los israelitas? (Vea el dibujo de la portada).

⁴ Jehová nombró a Moisés para que sacara de Egipto a los israelitas y les dio pruebas claras de que estaba utilizando a ese hombre para guiarlos. Una de esas pruebas fue la columna de nube que veían durante el día y la columna de fuego que veían de noche (Éx. 13:21). Moisés siguió esa columna y, como resultado, él y los israelitas llegaron al mar Rojo. Cuando los israelitas pensaron que estaban atrapados entre el mar y el ejército egipcio, entraron en pánico. Dieron por hecho que Moisés había cometido un terrible error al llevarlos allí. Pero de error no tenía nada. Fue Jehová quien hizo que Moisés los llevara justo a ese lugar (Éx. 14:2). Y luego los salvó con un milagro impresionante (Éx. 14:26-28).

⁵ Durante 40 años, Moisés siguió la columna de nube para guiar al pueblo de Dios por el desierto. a En ocasiones, Jehová hacía que la columna se colocara sobre la tienda de Moisés, donde todos podían verla (Éx. 33:7, 9, 10). Desde esa columna, Jehová le hablaba a Moisés, y él después le transmitía sus instrucciones al pueblo (Sal. 99:7). Así que los israelitas tenían pruebas de sobra de que Jehová estaba usando a Moisés para guiarlos.

6. ¿Cómo respondieron los israelitas a la guía de Jehová? (Números 14:2, 10, 11).

⁶ Por desgracia, la mayoría de los israelitas rechazaron las claras pruebas de que Jehová había elegido a Moisés como su representante (lea Números 14:2, 10, 11). Como se negaron una y otra vez a reconocer el papel de Moisés, Jehová no les permitió entrar en la Tierra Prometida (Núm. 14:30).

7. ¿Quiénes siguieron la guía de Jehová? (Números 14:24; vea también la imagen).

⁷ Ahora bien, hubo algunos israelitas que sí siguieron la guía de Jehová. Por ejemplo, Jehová dijo: “Caleb [...] continuó siguiéndome con todo el corazón” (lea Números 14:24). Dios lo recompensó y hasta le permitió elegir en qué lugar de Canaán quería vivir (Jos. 14:12-14). Al igual que Caleb, la siguiente generación de israelitas se dejó guiar por Jehová. De hecho, “respetaron profundamente durante todos los días de su vida” a Josué, el hombre al que Jehová eligió para que sustituyera a Moisés como líder de la nación (Jos. 4:14). Por eso, Jehová los bendijo y les permitió entrar en la Tierra Prometida (Jos. 21:43, 44).

8. ¿Cómo guio Jehová a su pueblo durante la época de los reyes? (Vea también la imagen).

⁸ Años después, Jehová nombró jueces para que guiaran a su pueblo. Más adelante, durante la época de los reyes, designó profetas para esta labor. Los reyes que fueron fieles a Dios escucharon los consejos de los profetas. Por ejemplo, el rey David aceptó con humildad la corrección del profeta Natán (2 Sam. 12:7, 13; 1 Crón. 17:3, 4). El rey Jehosafat hizo caso a lo que le dijo el profeta Jahaziel y animó a los habitantes de Judá a tener fe en los profetas de Dios (2 Crón. 20:14, 15, 20). Y, en tiempos de angustia, el rey Ezequías le pidió ayuda al profeta Isaías (Is. 37:1-6). Siempre que los reyes seguían la guía de Jehová, él los bendecía y protegía a la nación (2 Crón. 20:29, 30; 32:22). Estaba tan claro como el agua que Jehová usaba a los profetas para guiar a su pueblo. Sin embargo, la mayoría de los reyes y de los israelitas los rechazaron (Jer. 35:12-15).

CÓMO GUIO JEHOVÁ A LOS PRIMEROS CRISTIANOS

9. ¿Cómo guio Jehová a los cristianos del siglo primero? (Vea también la imagen).

⁹ En el siglo primero, Jehová formó la congregación cristiana. ¿Cómo guio a su pueblo en aquel tiempo? Nombró a Jesús cabeza de la congregación (Efes. 5:23). Pero, claro, Jesús no hablaba directamente con cada cristiano para decirle qué hacer, sino que utilizaba a los apóstoles y a los ancianos de Jerusalén para dirigir la obra (Hech. 15:1, 2). Además, en cada congregación se nombraron ancianos para guiar a los hermanos (1 Tes. 5:12; Tito 1:5).

10. a) ¿Cómo respondieron la mayoría de los cristianos del siglo primero a las instrucciones que recibieron? (Hechos 15:30, 31). b) ¿Por qué algunos no aceptaron a los representantes de Jehová en tiempos bíblicos? (Vea el recuadro “ Por qué algunos se niegan a aceptar lo evidente”).

¹⁰ ¿Y cómo respondieron los cristianos del siglo primero a las instrucciones que recibieron? La mayoría de ellos las siguieron de buena gana. De hecho, “se sintieron felices por las palabras de ánimo” que recibieron (lea Hechos 15:30, 31). Ahora bien, ¿cómo ha estado guiando Jehová a su pueblo en nuestros días?

CÓMO NOS GUÍA JEHOVÁ HOY EN DÍA

11. Mencione un ejemplo que muestre cómo Jehová ha guiado a sus representantes en la actualidad.

¹¹ En nuestros días, Jehová sigue guiando a su pueblo mediante su Palabra y su Hijo, la cabeza de la congregación. ¿Tenemos pruebas de que ha seguido utilizando a seres humanos como representantes suyos? Sí. Pensemos, por ejemplo, en lo que pasó a finales del siglo diecinueve. Charles Russell y sus colaboradores comprendieron que 1914 sería un año muy importante para el Reino de Dios (Dan. 4:25, 26). ¿Cómo llegaron a esa conclusión? Estudiando las profecías de la Biblia. Y, sin duda, Jehová guio su trabajo de investigación. Lo que sucedió en el mundo en 1914 confirmó que el Reino de Dios había comenzado a gobernar: estalló la Primera Guerra Mundial y hubo epidemias, terremotos y hambre (Luc. 21:10, 11). Quedó claro que Jehová estaba usando a esos hombres de buen corazón para ayudar a su pueblo.

12, 13. ¿Qué se hizo durante la Segunda Guerra Mundial para darle un impulso a la predicación y la enseñanza?

¹² Pensemos también en algo que ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial. Los hermanos responsables de la central mundial estudiaron lo que dice Apocalipsis 17:8 y entendieron que después de la Segunda Guerra Mundial no llegaría el Armagedón, sino que habría un periodo de paz que permitiría predicarles a más personas. Por eso, la organización de Jehová tomó una decisión que a lo mejor no parecía muy lógica en aquel momento: dio inicio al Colegio Superior Bíblico de la Watchtower de Galaad, b con el propósito de preparar a misioneros para que fueran a predicar y enseñar a otros lugares del mundo. Incluso durante la guerra, se envió a hermanos a distintos países. Además, el esclavo fiel creó el Curso en el Ministerio Teocrático c para ayudar a todos los publicadores a ser mejores maestros. Todo esto preparó a los siervos de Jehová para la labor que tenían por delante.

¹³ Podemos ver claramente que Jehová guio a su pueblo en esa época tan complicada. Desde que terminó la Segunda Guerra Mundial, los siervos de Jehová han podido predicar con libertad en muchos lugares. De hecho, muchas personas han llegado a conocer a Jehová, y hoy se predica en toda la Tierra.

14. ¿Por qué podemos confiar en la guía de la organización de Jehová y de los ancianos? (Apocalipsis 2:1; vea también la imagen).

¹⁴ Hoy en día, los miembros del Cuerpo Gobernante siguen buscando la guía de Cristo. Hacen todo lo posible para que las instrucciones que dan estén en armonía con el punto de vista de Jehová y de Jesús. Y, por medio de los superintendentes de circuito y los ancianos, les hacen llegar esas instrucciones a las congregaciones. d Los ancianos ungidos —y, por extensión, todos los ancianos— están en la “mano derecha” de Cristo (lea Apocalipsis 2:1). Como son imperfectos, a veces cometen errores, tal como les pasó a Moisés, a Josué y a los apóstoles (Núm. 20:12; Jos. 9:14, 15; Rom. 3:23). Sin embargo, sabemos que Jesús guía de cerca al esclavo fiel y a los ancianos, y seguirá haciéndolo “todos los días hasta la conclusión del sistema” (Mat. 28:20). Por lo tanto, tenemos razones de peso para confiar en la guía que nos da mediante estos hermanos.

LOS BENEFICIOS DE SEGUIR SIEMPRE LA GUÍA DE JEHOVÁ

15, 16. ¿Qué aprende de quienes se han dejado guiar por Jehová?

¹⁵ Seguir siempre la guía de Jehová nos beneficia incluso ahora. Por ejemplo, Andy y su esposa, Robyn, aplicaron el consejo de llevar una vida sencilla (vea la segunda nota de estudio de Mateo 6:22, en la Biblia de estudio). Eso les permitió colaborar en proyectos de construcción de la organización. Ella cuenta: “Hemos vivido en sitios muy pequeños, y muchas veces no teníamos donde cocinar. Además, me encanta la fotografía, pero tuve que vender gran parte de mis cámaras y accesorios. Aunque los vendí con lágrimas en los ojos, estaba decidida a ser como Sara, la esposa de Abrahán, y no mirar atrás, sino adelante” (Heb. 11:15). ¿Están contentos con la decisión que tomaron? Ella sigue diciendo: “Nos sentimos muy felices porque sabemos que le estamos dando a Jehová todo lo que tenemos. Cada vez que trabajamos para Jehová es como si diéramos una probadita de cómo será la vida en el nuevo mundo”. ¿Y qué piensa Andy? Él dice: “No hay mayor alegría que desgastarse completamente por el Reino”.

¹⁶ ¿Cuál es otro beneficio de seguir siempre la guía de Jehová? Veamos el caso de una hermana llamada Marcia. Cuando terminó sus estudios, decidió seguir el consejo de empezar el precursorado (Mat. 6:33; Rom. 12:11). Ella explica: “Una universidad me ofreció una beca de cuatro años. Pero yo quería concentrarme en metas espirituales, así que decidí apuntarme a una escuela técnica para aprender un oficio con el que pudiera ganarme la vida y ser precursora. Fue una de las mejores decisiones de mi vida. Ahora soy precursora regular, y mi horario de trabajo me permite ser voluntaria externa en Betel y disfrutar de otros bonitos privilegios”.

17. ¿De qué otras maneras nos beneficia seguir siempre la guía de Jehová? (Isaías 48:17, 18).

¹⁷ En ocasiones, la organización de Jehová nos da consejos que nos protegen del materialismo y de otras cosas que pudieran llevarnos a desobedecer las normas de Dios. En estos casos, seguir la guía de Jehová también nos beneficia, pues mantenemos una conciencia limpia y nos evitamos muchos dolores de cabeza innecesarios (1 Tim. 6:9, 10). Así podemos centrarnos por completo en nuestro servicio a Jehová. No hay nada que nos haga tan felices y nos dé tanta paz (lea Isaías 48:17, 18).

18. ¿Por qué quiere usted seguir siempre la guía de Jehová?

¹⁸ Jehová seguirá usando a seres humanos para guiar a su pueblo durante la gran tribulación y durante el Reinado de Mil Años (Sal. 45:16). En ese tiempo, ¿seguiremos su guía incluso cuando implique dejar a un lado nuestras preferencias? Si ahora somos obedientes, nos resultará más fácil serlo también en el futuro. Por lo tanto, sigamos siempre la guía de Jehová, y eso incluye la que nos da mediante los hombres que ha nombrado para cuidarnos (Is. 32:1, 2; Heb. 13:17). Tenemos razones de sobra para confiar en Jehová, nuestro guía, que nos ayuda a evitar los peligros espirituales y a llegar al nuevo mundo, donde viviremos para siempre.