Sí. Todos los testigos de Jehová somos ministros, o predicadores, y entre nosotros hay millones de mujeres. De hecho, la misma Biblia dice: “Las mujeres que anuncian las buenas nuevas son gran multitud” (Salmo 68:11, La Biblia de las Américas).
Las Testigos siguen el ejemplo de las fieles mujeres que menciona la Biblia (Proverbios 31:10-31). Aunque no ocupan puestos de responsabilidad en la congregación, participan con entusiasmo en el ministerio público y cumplen un importante papel en enseñar a sus hijos los principios bíblicos (Proverbios 1:8). Además, mediante sus palabras y acciones procuran ser una influencia positiva para los demás (Tito 2:3-5).