“El mundo entero está bajo el control del maligno” (1 Juan 5:19, Nueva Versión Internacional).

“Por eso vino el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo” (1 Juan 3:8, Torres Amat).

Podemos entender la raíz de los problemas del mundo (Apocalipsis 12:12).

Nos da motivos para esperar un mundo mejor (1 Juan 2:17).

Sí, al menos tres:

• El gobierno de Satanás está sentenciado. Jehová está decidido a acabar con el control de Satanás sobre la humanidad. Él promete “acabar con [...] el Diablo” y reparar todo el daño que ha causado (Hebreos 2:14, Traducción del Nuevo Mundo, 2019).

• Jesucristo es el gobernante escogido por Dios. Jesús es el polo opuesto al gobernante cruel y egoísta que controla hoy el mundo. De hecho, Dios promete respecto al reinado de Cristo: “Tendrá compasión del humilde y del pobre [...]. Los rescatará de la opresión y de la violencia” (Salmo 72:13, 14).

• Dios no puede mentir. La Biblia dice sin rodeos que “es imposible que Dios mienta” (Hebreos 6:18). Así que, cuando Jehová promete algo, podemos darlo por hecho (Isaías 55:10, 11). Y lo que ha prometido es que “el gobernante de este mundo será echado afuera” (Juan 12:31).