Nuestro Creador no es una fuerza impersonal. Él sí tiene personalidad, y esta es fascinante. Como él quiere que lo conozcamos y seamos sus amigos, nos ha contado muchas cosas sobre él mismo (Juan 17:3; Santiago 4:8).
Nuestro Creador tiene nombre
“Que la gente sepa que tu nombre es Jehová, que solo tú eres el Altísimo sobre toda la tierra” (SALMO 83:18).
La Biblia enseña que Jehová es el único Dios verdadero y que él creó el universo y la vida. Por eso, solo él merece que lo adoremos (Apocalipsis 4:11).
Jehová usa la Biblia y las cosas que ha creado para enseñarnos cómo es él. Lo que más destaca de su personalidad es el amor, porque todo lo que hace lo hace por amor. Cuanto más conocemos a Jehová, más lo amamos.
Jehová perdona
“Tú eres un Dios dispuesto a perdonar” (NEHEMÍAS 9:17).
Jehová sabe que somos imperfectos, y por eso está dispuesto a perdonarnos. Si le pedimos perdón y nos esforzamos por dejar de hacer lo que a él no le gusta, él nos perdonará y no nos castigará por nuestros errores (Salmo 103:12, 13).
Jehová quiere que le oremos
“Jehová está cerca de todos los que lo llaman [...]; oye sus gritos de auxilio” (SALMO 145:18, 19).
Jehová no quiere que hagamos rituales especiales o que usemos objetos para adorarlo. Él escucha nuestras oraciones igual que un padre cariñoso escucha a sus hijos.