Jehová crea a Adán y Eva y les da la posibilidad de vivir para siempre en el Paraíso. Satanás insulta el nombre de Jehová y cuestiona su derecho a gobernar. Adán y Eva se unen a la rebelión del Diablo, condenando así a la humanidad al pecado y la muerte
Dios dicta sentencia contra los rebeldes y promete que una Descendencia destruirá a Satanás y reparará el daño causado por la desobediencia y el pecado
Dios promete a Abrahán y a David que serán antecesores de la Descendencia, el Mesías que reinará para siempre
Jehová anuncia mediante sus profetas que el Mesías acabará con el pecado y la muerte y será el Rey del Reino de Dios. Con él reinará también un grupo de personas, y juntos pondrán fin a las guerras, las enfermedades y la muerte
Jehová revela que Jesús es el Mesías. Él lo envió a la Tierra para que predicara el Reino de Dios y se sacrificara por la humanidad. Al morir, Jehová le devuelve la vida como ser espiritual
Dios nombra Rey en los cielos a Cristo, y comienzan los últimos días de este mundo. Jesús supervisa la proclamación mundial del Reino de Dios
Jehová manda a su Hijo que comience a ejercer su autoridad sobre la Tierra. El Reino destruye los gobiernos humanos, restablece el Paraíso y devuelve la perfección a los fieles. El derecho de Jehová a gobernar nunca volverá a cuestionarse, y su nombre será santo y limpio para siempre