RESUMEN: Hable con sinceridad y muestre que se preocupa por sus oyentes.
CÓMO HACERLO
Piense en sus oyentes. Cuando se prepare, reflexione en los problemas que ellos afrontan e intente imaginar cómo se sienten.
Elija con cuidado sus palabras. Procure animar, consolar y fortalecer a sus oyentes. No use expresiones ofensivas. No hable con desprecio de quienes no sirven a Jehová ni critique sus creencias.
Muestre interés. Puede lograrlo usando un tono de voz agradable y gestos apropiados. Piense en lo que transmite con sus expresiones faciales. Sonría con frecuencia.